Balance de la campaña electoral según politólogos: Narrativas de candidatos no conectaron con la gente
Este 25 de mayo hay comicios regionales y parlamentarios en todo El país

Al término de la campaña electoral y a pocas horas del 25 de mayo, poco es el entusiasmo que se percibe en las calles ante la idea de salir a votar por diputados de la Asamblea Nacional (AN), gobernadores y de los Consejos Legislativos entre los ciudadanos que se dan por enterados. Otros, todavía preguntan de qué se tratan las elecciones del domingo.   

A juicio de politólogos consultados por Efecto Cocuyo el corto lapso (29 de abril al 22 de mayo) con el que contaron los candidatos, principalmente de la oposición (Un Nuevo Tiempo-Unión y Cambio) más otras limitaciones, pareciera no lograr revertir el desánimo por lo ocurrido el 28 de julio ni desplazar el llamado a no participar de la líder opositora María Corina Machado, aunque, aclaran, la votación puede variar según la región cómo el de caso Zulia, por ejemplo.

“Campaña atípica” 

Por un lado, señalan que el chavismo al no ver amenazas a su permanencia en el poder en estos comicios, concentró su mensaje en su «disminuida base electoral» que le resultaría suficiente para hacerse con la mayoría de los cargos, además de “generar miedo” entre los adversarios con otra ola de detenciones.

En la acera opositora no hubo grandes actos de campaña ni siquiera al cierre, lo que arroja dudas sobre el propósito real de este sector de participar en elecciones pese a la ausencia casi absoluta de garantías democráticas.

“Más allá de hablar de un balance de la campaña electoral creo que cabría la pregunta, ¿Cuál  campaña? ¿Realmente la hubo?. Un video, luego convertido en meme, de Henrique Capriles, hablándole a una señora en su hogar y la expresión de desgano de ella, creo que resume cómo interpreta la gente estas elecciones y ese llamado a participar a pesar de todo y eso pudiera quedar evidenciado el domingo”, señaló el politólogo Tony Frangie Mawad. 

Piero Trepiccione resalta que fue una campaña electoral “atípica” con escasa información y promoción institucional por parte del Consejo Nacional Electoral, un sector mayoritario de la oposición que llama a no participar y la demanda de los resultados de las elecciones presidenciales del 28 de julio, como factores que jugaron en contra. 

“Sin dejar de mencionar el contexto del país que impacta la cotidianidad de la gente. Las narrativas políticas para esta campaña no estaban alineadas con los problemas de la gente, hubo un desapego”, resaltó el también consultor en opinión pública e incidencia.

Mínima participación y miedo alimentan al Psuv

Atrás quedó la época en el que el portaviones presidencial rojo llegaba a los estados a alzarle el brazo a los candidatos a gobernadores. Nicolás Maduro solo apareció en Caracas para cerrar con una marcha en compañía de candidatos a diputados, los únicos cargos que se eligen en la capital, entre ellos su hijo Nicolás Maduro Guerra. El peso de la promoción de la oferta electoral se la compartieron el jefe de campaña Jorge Rodríguez y el número dos del chavismo, Diosdado Cabello.

El chavismo en estas elecciones no tiene una amenaza existencial como la tuvo el 28 de julio, no tiene un contrincante real y depende de su base sólida que tiene para movilizar, aunque no necesariamente se identifica con Maduro sino con el chavismo. Según la encuesta Delphos con la UCAB, hablan de 15% de votantes que tienen altas probabilidades de participar, un 18% media alta y que de ese grupo un poco más de 74% se identifica con el chavismo y solo 13% con la alianza entre Rosales y Capriles”, apuntó Mawad.

Trepiccione también recuerda que en Venezuela – a diferencia de otros países que establecen un mínimo de participación para la adjudicación de un cargo y una segunda vuelta electoral – se gana con una mayoría de votos así la votación sea de 5% o 10% y el chavismo usa esta “simplicidad” del sistema electoral a su favor. 

Chavismo no solo llamó a votar en el cierre de campaña, también resaltó oleada de detenciones en el país

“El Psuv es la primera minoría dentro del país político y cuentan con ese porcentaje enano, activo y organizado”, acotó. 

Pero al cierre del lapso para la propaganda electoral, este jueves 22 de mayo, los mensajes del chavismo no solo se centraron en llamados a votar. Tanto Maduro como Cabello lanzaron serias advertencias a quienes pretendieran “sabotear” la jornada electoral. 

“El que salga a joder lo vamos a joder nosotros”, dijo Cabello desde Delta Amacuro, tras asegurar que la oposición que acude a las urnas se esta preparando para desconocer resultados. Maduro por su parte, insistió en una nueva conspiración en su contra, dio cuenta de 50 detenciones y dijo que aún faltaban capturas. La situación escaló con la detención del dirigente de Primero Justicia, Juan Pablo Guanipa, un día después y un nuevo balance de 70 detenidos por parte de Cabello.

Algunos analistas interpretaron esta nueva oleada de detenciones por motivos políticos como un desestímulo a la participación de este domingo.

¿Llamados a votar calaron?

La alianza UNT-Única aseguró haber hecho esfuerzos en medio de limitaciones financieras, de tiempo y riesgos a la seguridad, para promover la participación electoral este 25 de mayo, como herramienta para la organización opositora  por el cambio político frente a la “inacción”. Pese a ello, dirigentes como Stalin González, jefe de campaña y candidato a la AN, itieron que hubo comunidades en las que la gente ni sabía que había elecciones. 

En las calles de estados como el Táchira, Miranda y la propia capital, Caracas, la ausencia de propaganda en paredes y postes fue casi absoluta hasta la última semana y el volanteo muy escaso. 

Mawad recalca que más que las limitaciones descritas, la desconfianza hacia el árbitro y el sistema electoral y hacia la misma oposición que participa juegan en contra del mensaje que quiso enviar el sector liderado por Manuel Rosales y Henrique Capriles. 

“Son percibidos como que están en la búsqueda de cuotas de poder, en una lucha por la supervivencia para convertirse en parte del sistema más que una oposición al sistema y por eso muchos ven esta elección como una repartición de cargos, de cuotas. Ni siquiera se percibe un interés, una estrategia de unión de todas las fuerzas opositoras sino más bien una fragmentación intencional”, señaló.

De cumplirse los pronósticos de muy baja participación de votantes este 25 de mayo, Mawad esperaría que el discurso que promueve la división opositora se vea acrecentado luego de los comicios, cuando el sector que participa culpe al liderazgo de María Corina Machado de la derrota propinada producto de la abstención. 

“Constataremos este 25 de mayo, si ese mensaje de la oposición que participa caló o no en los electores, pero dada la poca expectativa pareciera que no logró un arrastre. Pero hay que tener en cuenta que la participación puede variar de un circuito o estado a otro, la media nacional puede obedecer a la expectativa de poca participación pero en algunos estados también puede haber variedad, dependiendo de la narrativa y la batalla particular de cada candidato, en medio de la opacidad informativa que predominó en el proceso”, aclaró Trepiccione.

Esos estados en los que la votación puede variar son principalmente Zulia con la candidatura de Rosales y Miranda con Juan Requesens, además de las entidades donde hoy gobierna la oposición como Cojedes, Nueva Esparta y Barinas.