Lucía Pérez, de 16 años de edad, la drogaron en la puerta de su escuela en Mar del Plata (Argentina), la secuestraron y fue abusada sexualmente con la violencia suficiente como para asesinarla. Este caso desató una oleada de indignación en toda Latinoamérica y originó la movilización masiva de personas en distintos puntos de la región, desde el obelisco de Buenos Aires hasta la plaza de la Independencia de Ciudad de México y desde la Alameda de Santiago de Chile a las calles de Sao Paulo, para protestar contra la violencia machista. La manifestación global fue convocada en los últimos días por el colectivo “Ni Una Menos“, que multiplicó su altavoz por medio de las redes sociales. Según el Observatorio de Igualdad de Género de América Latina y el Caribe de la Comisión Económica de América Latina y el Caribe (Cepal), al menos 1.678 mujeres fueron asesinadas por razones de género en América Latina durante el año 2014. Con el nombre #MiércolesNegro, Buenos Aires fue el epicentro de la movilización y miles de personas vestidas de luto volvieron a reclamar “Ni una menos, vivas nos queremos“, un lema con el que pidieron el fin de la violencia machista que se lleva cada año la vida de más de 200 mujeres en Argentina. Los países vecinos del Cono Sur se sumaron también a la indignación que ha corrido por todas las ciudades y pueblos argentinos. En Montevideo (Uruguay), cientos de personas marcharon bajo la lluvia por el centro de la ciudad bajo el lema “Movilizadas nos encontramos con rabia, bronca y dolor“. También en Chile, por la principal avenida de la capital, Santiago, desfilaron decenas de miles de mujeres vestidas de negro reclamando el endurecimiento de las penas contra la violencia de género. En la ciudad más grande de Suramérica, Sao Paulo (Brasil) un pequeño grupo de mujeres mostró también su solidaridad con la joven argentina asesinada y contra el machismo latente que aún persiste en las relaciones sociales entre ambos géneros. De igual forma ciudadanos anónimos, en algunos casos de luto y con velas, de Asunción (Paraguay), La Paz (Bolivia) y en Lima (Perú), se sumaron a la convocatoria de protesta. En Centroamérica, que cuenta con los ratios más altos por violencia machista del continente (Honduras, El Salvador y Guatemala encabezan la lista de crímenes de género, según el informe anual 2015 de ONU Mujeres para América Latina), las manifestaciones han tenido un propio sentido regional. Mientras que en la ciudad de Panamá, medio centenar de personas denunciaba la puesta en libertad de los sospechosos de un feminicidio ocurrido en 2012, en otros lugares como Guatemala o Nicaragua las demandas han sido más globales. En Ciudad de México, al grito “Ni una menos“, cientos de personas vestidas de negro y con banderas y pancartas moradas, protestaron en el céntrico monumento conocido como Ángel de la Independencia. La protesta tuvo réplicas en otras ciudades del país. El clamor internacional contra la violencia machista también tuvo eco en Europa donde en ciudades de España y Francia hubo denuncia en las calles contra la violencia machista, en esta jornada denominada en toda América como “Miércoles Negro“. Veinte países de América Latina y el Caribe cuentan actualmente con leyes de violencia contra las mujeres, aunque solo en ocho se asignan recursos específicos en su presupuesto nacional. De igual forma, catorce países han tipificado el delito de feminicidio y dos lo han establecido como un homicidio agravado por razones de género en su legislación. Con información y fotos de EFE]]>
#MiércolesNegro Latinoamérica protestó contra la violencia machista
